TESTIMONIOS Y PROFECÍAS !!!!!

 

   Testimonio de Niña, que encontró en sus pelos la seguridad y el punto de partida para regresar a la tierra.

   Dejando crecer un poco sus  pelos ya-no púberes, Niña pensó que los pelos “del señor” de enfrente podían equipararse a los suyos; pero luego vio que los de él eran x accidente, él no había escogido tenerlos, Niña se quedó pensando… 

   Otro día se olió a sí misma y encontró placer en ello, “pero si el sudor es bueno!!” Se dijo… “mmmmm  que fresco!!”

   Sus pelos curvilíneos la miraban siempre y le hacían recordar el aire, pues su roce con éste le permitía sentirlos, y así era como recordaba a lxs pájarxs y moscas en fricción con el aire...  Y se ponía a pensar en la maleza que crecía suelta y que también se movía con le vientx.. y sintiendo la maleza, y queriendo ir a fondo, llegó a las raíces de ésta, y así fue que recordó a la tierra… y le dio por sembrar…

Testimonios de lxs bichxs rastrerxs…

El viernes pasado sucedió una manifestación a la puerta de la casa de "mi" madre, se trataba de unxs bichxs rastrerxs pidiendo una explicación del xq ella como casi todx el mundo, lxs asociaba con el “mal” (y  no tanto xq creyeran en la pureza de lx bueno, sino xq –según me comentan lxs bichxs- les parece un insano prejuicio que por ser rastrerxs sean vistxs como “lxs malxs” del cuento).

… La manifestación ocurrió a la orilla de un pedazo de pan. Ella, madre, lxs miraba y desdeñaba; pero lxs bichxs, como práctica crítica y cuestionando su supuesto papel maligno… le llevaron serenata… con temáticas de amores no románticos… Desafortunadamente ese día no llevábamos cámara fotográfica, así que pedimos, como en varios de lxs testimonios presentes, su fe, creyendo que este testimonio es digno de fe y crédito.

Testimonio… del día en que caminaba(mos) por la calle empedrada

Resistencia en las células, creatividad en las venas…

Aún tengo la magia suficiente… para presenciar los momentos en que laspiedras se levantan… haciendo muecas, kminando lento.. con un ojo que ocupa la mayor parte de su espacio. Haciéndome latir el corazón, recordándome que todo puede levantarse, que mis órganos podrían hablarme un día, relativizando la que hoy considero mi única boca, la calidad identitaria de mi rostro, la supuesta y única yo, mi nombre fijo… no en un afán de invisibilidad, sino todo lo contrario, en un afán de otras formas de presencia... Toda(s) mi(s) yo (s) viviente (s), todas sintientes, todas parlando y bailando...¿al compás de qué? ¿de corazones libres? ¿de los impulsos corporales que hemos construido con memoria,  y que han recorrido nuestrxs cuerpxs alimentándonos todasssSS?… ¿cuál sería nuestro propio son… la canción que vamos cantando?... ¿se iría todo caminando? … piedras marchando…

Testimonio del amor entre la ex - princesa y la tierra

…La princesa felizmente dejó caer la corona en una reverencia a carcajadas.. fin de la demencia…

- de la ahora ex – princesa-  :

Mientras la ex – princesa se reverenciaba a sí misma y a la tierra que soñaba, el humor brumoso de su propio humor, las mejillas coloreadas y los dátiles pezones le crecían…

…Kaminó al horizonte…

¿y no había nada ?

No no, no era eso!  Es que no buscaba encontrar especificidades andadas, o recuerdos educados. Es que se le apareció:

“la  in-cer-ti-dum-bre”, mientras se asomaba a nuevos inventos.

- de la tierra- :

La tierra –no firme-, a la ex  princesa tiraba  una y otra carcajada, le hacía guiños de tiempos pasados que la otra había olvidado, pero que seguro (eso esperaba la tierra) la ex princesa sentía en los pies bajo los que siempre se miraban.

-        de ambas- :

Entonces la ex princesa se acostó  en la tierra, se inclinó para escucharla. ¿y sabes que le dijo? Le dijo besos, le dijo parla, le dijo mira, le dijo canta.

La ex princesa se acomodó en el pecho de la tierra, pensando en beberse miradas. Se acomodó en su sexo, sintiendo como la abrazaba,

Y la cultura se borraba, y la memoria empezaba

Y los latidos sonaban

Y sus nombres dibujaban

Y se cagaron del oro, mientras comían manzanas

Y se cagaron de las balas, por antes creer que atravesaban

Y se borró su distancia, ya no eran islas …  extravagancias…

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